martes, 4 de noviembre de 2008

Sueño

Anoche tuve un sueño en donde los personajes éramos tu y yo. Tú como siempre inalcanzable, yo para variar enajenada. ¿Y sabes por qué? Porque es imposible aplacar tus manos y amarrar mi pecho a las ganas y es más imposible aún ignorar el sentimiento de quererte como mío. En ese sueño no había sol, no había luna ni estrellas, pero estábamos tú y yo jugando a serlo y sujetándonos fuertes al segundero pendiente que por primera vez el destino nos prestaba como nuestro. No había día pero no lo necesitábamos, ni cama para hacernos compañía ni calle para resonar los pasos; se reducía a los cigarros que guardabas en el bolsillo y que fueron desapareciendo por pares hasta que el bolsillo se quedó vacío. Y volvimos a jugar a ser dos solos en el mundo y fuimos todos para nuestros cuerpos. Y el mundo seguía girando.
La primera vez que alcancé tu piel parecía inaccesible, después la mía se volvería con un grito a tu memoria en donde lucha aún por no ser aniquilada.
En mi sueño te hospedaste en mí y yo, en mi realidad, sigo esperando tu visita. Sigo matando la eternidad con un cigarro y mientras espero impaciente, la espera sigue siendo eterna y lo seguirá siendo; seguiré esperando, creyendo o tal vez soñando para sentirte más cerca, para sentirme menos lejos o en cualquiera de las formas sentirnos en compañía.
Mientras tu cuerpo no se clave en el mío, mientras la brisa siga llegándome desde tu boca, mientras sigamos viendo las mismas estrellas y quemándonos por el mismo sol seguiré sentada en mi ventana visitando el horizonte por si te asomas un poco por lo menos.
¿Qué pudo ser? Puedo llegar a adorarte y me vengo apenas dando cuenta. Puedo decir que te quiero, que te traería de vuelta de donde fuese, que mi cuerpo arde en sudor por rozar el tuyo, que se dilata bajo tu mirada y se vuelve sofocante el abismo y sigue siendo abismo y lo seguirá siendo por instantes. Todos menos los momentos en que mi memoria te trae de regreso y me alegro de que esos momentos sean todos.

1 comentario:

juanxon dijo...

muy buen escrito
me puso a pensar en muchas de las formas en que pretendo hacer volver a las personas a mi lado
aunque la mayoria son mentales y en sueños
y otras mas no pretendo solo llegan..
me gusto el final
un abrazo y lo mejor
nos estamos leyendo